Esterilizaciones con técnica laparoscópica

Porque tu mascota merece lo mejor

Un estudio publicado en el “Journal of Veterinary Medical Associaton” concluyó que las esterilizaciones llevadas a cabo por técnicas de laparoscopia causaban menos estrés quirúrgico y hasta un 65% menos de dolor postoperatorio que una esterilización quirúrgica tradicional.

En una esterilización tradicional se realiza una incisión de unos 3 a 10 cm en el abdomen, a través de la cual se tracciona del ligamento ovárico sin visión directa. Esta tracción causa pequeños traumas y hematomas en la pared abdominal, relaccionado con un mayor dolor postoperatorio. Esta incisión también necesita un mayor tiempo de cicatrización, y una mayor probabilidad de sufrir infecciones o dehiscencias comparado con la técnica laparoscópica.

Con las técnicas de mínima invasión, se observan las estructuras internas del abdomen, el procedimiento se realiza a través de dos a tres pequeños orificios creados en el abdomen (0,32 a 1,4cm en función del tamaño del paciente). Un laparoscopio (cámara) magnifica las estructuras internas del abdomen en un monitor, lo que permite una mayor precisión y menos complicaciones. La vista ampliada del ligamento ovárico le permite al cirujano cortarlo con cuidado y cauterizarlo, en lugar de traccionar ciegamente como en una esterilización tradicional. Esto elimina el dolor que el animal experimentaría por la tracción del ligamento. Las pequeñas incisiones se suturan y cicatrizan en un tiempo menor, favoreciendo la vuelta a la normalidad más rápido y reduciendo las complicaciones. Se experimentará menos trauma, se recuperará más rápido, y experimentará hasta un 65% menos de dolor postoperatorio.

En casos de razas grandes, o con torax profundo, se puede también aprovechar la cirugía para realizar una gastropexia, también por mínima invasión. Con esta técnica prevenimos la temida

torsión gástrica, patología potencialmente mortal que es más frecuente en este tipo de razas.

 

Esterilización laparoscópica

  • 2-3 pequeñas incisiones

  • Reducción del dolor gracias a cortes quirúrgicos precisos

  • Hasta un 65% menos de dolor postoperatorio

  • Técnicas mínimamente invasivas que reducen el riesgo de infección

  • Una recuperación más rápida y una pronta vuelta a la actividad normal

 

 

Al incorporar las mismas técnicas que se ven en la medicina humana, la esterilización laparoscópica permite brindar a nuestras mascotas el mismo cuidado que esperaríamos para nosotros. Es una alternativa de curación más segura, menos dolorosa, y más rápida que las esterilizaciones tradicionales. Una alternativa menos estresante para ellos, y para nosotros.